El correo electrónico es un objetivo principal para los piratas informáticos y los delincuentes de datos. Por ello es fundamental garantizar que tu correo electrónico privado se mantenga protegido en todo momento.
La idea de que alguien pueda tener acceso a nuestros correos electrónicos personales es inquietante. La buena noticia es que siguiendo las recomendaciones que indicamos a continuación, podemos proteger nuestro email.
¿Cómo proteger tu correo electrónico privado?
Utiliza la autenticación de dos factores
La autenticación de dos factores funciona con la simple idea de combinar lo que sabes con algo que tienes. La ventaja es que no estás depositando toda tu confianza en una contraseña cuando habilitas la autenticación de dos factores.
Dado lo inseguras que son muchas de nuestras contraseñas, esto es algo positivo. Configurar la verificación en dos pasos para Gmail por ejemplo, es tan fácil como hacer clic en un botón e ingresar tu número de teléfono. Es el mismo procedimiento para Windows Mail o Outlook. Simplemente inicia sesión, navega hasta la pestaña "Contraseña y protección" y selecciona "Configurar verificación en dos pasos".
Un pirata informático con tu contraseña no tendrá suerte, una vez configurada la autenticación de dos factores. Esto claro, a menos que ya haya logrado robar tu teléfono.
Establece fechas de vencimiento para tus mensajes
Aunque algunos de nosotros no soportamos una bandeja de entrada desordenada, el usuario promedio no se molesta en limpiar su correo electrónico personal y considera que eliminarlo es una pérdida de tiempo.
Eso significa que cualquier información confidencial que envíes a un cliente podría terminar almacenada en un servidor durante meses. Ya no tienes poder sobre el destino de tus datos en dicha etapa.
Afortunadamente, existen proveedores de correo electrónico privado, que te permiten establecer una fecha de vencimiento para tus mensajes. De esta manera, el destinatario o cualquier otra persona, ya no podrá leer esos mensajes, después de esa fecha de vencimiento.
Limita el reenvío de correos
A veces presionamos "reenviar" sin preocuparnos por las implicaciones, cuando recibimos un mensaje que queremos enviar. Pero debemos preguntarnos: ¿Cuál es el destino del mensaje? ¿Quién lo va a leer? ¿Qué le pasará a ese mensaje? ¿Dónde se guardará?
Por supuesto que si tu correo electrónico está alojado en un servidor corporativo, es casi seguro que estas medidas de seguridad estén implementadas para proteger cualquier información confidencial que se encuentre en tu correo electrónico privado.
Sin embargo, cuando se reenvía un correo electrónico interno a un destinatario fuera de tu empresa, esa información, junto con cualquier otro mensaje en la cadena de reenvío, están expuestos a servidores no cifrados y potencialmente no seguros.
Por ello, es muy recomendable limitar el uso de la función de reenvío en el correo electrónico.
Encriptar tu correo electrónico privado
El cifrado es la forma más segura de mantener tu correo electrónico privado a salvo de miradas indiscretas y piratas informáticos. El cifrado protege tu correo electrónico privado al combinar tus mensajes, haciéndolos difíciles de decodificar.
Esto claro a menos que le des a alguien un permiso específico para leerlos. Y si tu bandeja de entrada es hackeada, el contenido de tu mensaje sería ilegible si utilizas un servicio de cifrado del lado del cliente.